En nota manuscrita: "La vuelta de Iparraguirre", obra del pintor Pablo de Uranga. Se halla en Buenos Aires, en la colección de Andrés Garmendia (comentario a propósito de la foto que acompaña el artículo).
"Estampa magnífica, anchas barbas pluviales cayéndole sobre el pecho, la erguida figura envuelta en los nobles pliegues del poncho y la guitarra terciada sobre la espalda robusta. Cuando Iparraguirre se apeaba del caballo en las pulperías de Mercedes o de Dolores sabía que podía contar con la respetuosa admiración del paisanaje, que escuchaba con recogimiento casi sagrado la estremecida sucesión de sus tristes y sus vidalas"... (texto de José de España).